Este calorcito..

Esta mañana repasando el blog releí una entrada en la que hacía referencia a si el calor aguantaría por estas latitudes. Bien ,algun@ se atreve a hacer pronósticos...venga, sin cortarse, a lo Mario Picazo, qué tiempo hace por aquí????

Pues los voy a resumir de forma clara y mediana: un frío del carajo. Por la mañana unos 8 graditos, que por el día no sobrepasa los13; si a estas temperaturas le añadimos viento sin un mezquino rayo de sol, la mezcla resultante es que hay que abrigarse como el invierno alicantino. Claro, que un 20 de Junio, el chip no está preparado para ello y tendemos a salir con menos ropa de la recomendable. Manda huevos, por cierto, que desde Abril los escaparates están repletos de ropa veraniega: faldas, shorts, camisas de tirantes... pero pá qué, si en pleno verano hay que tener a mano el polar y los calcetines de lana !! Otro de los grandes misterios de estas tierras...

Ayer sábado aprovechamos para acercarnos a la zona del Atomium, otro de los símbolos de la ciudad. He hablado de la meteorología porque en la explanada Borja quedó tiritando como un muñequito de trapo. Luego, nos acercamos a la zona Japonesa, que se montón con motivo de la exposición Universal de 1905. Son tres pabellones, de Japón y China que contienen principalemente porcelana, así como diversos trajes de Samurais. Y eso sí, como en el resto de la ciudad, un parque mu, pero que mu chulo, al lado. Desde luego, por verde no es. Cuando lleguemos a Alicante puede que hasta nos resulte chocante y añoremos el verde; hay que ver como cambian las cosas.

Para entrar en calor nos acercamos de nuevo al Mercado de la pulgas, con la firme intención de repetir en el Cabraliego, asturiano del cual también os hablaba en un post anterior. Para nuestra desdicha el sábado no ofrecen comida, pero caímos en otro Español justo al lado, y dimos buena cuenta de una típica comida de tapeo española: calamares, conejo con allioli, sardinas, ensaladilla y patatas bravas, pero que requeteagusto comimos! Por cierto, el Cabraliego me volvió a impactar: cuando cruzas la puerta emprendes un viaje en el tiempo a un bar asturiano de hace 40 años sin necesidad de teletransporte ni desintegración de la materia!! Esta bruselas todavía sorprende.

Ahora toca cenar y el partidito de Brasil, pero luego, si me quedan ganas retomaré el blog con la Batalla de Waterloo, que parte de la familia ha ido a presenciar hoy domingo.

¡Macho el Hércules! De vuelta a primera tras 13 años!