Parece que tenemos casa

Como decía Einstein, el tiempo es relativo. Llevamos en Bruselas desde el sábado y me parece que ya llevo toda la vida; no sabemos si será el subidón de adrenalina, las cervezas o qué, pero estamos a gusto.

De carámbola en carámbola. El primer día de cole nos tuvimos que repartir, Carmi con Borja acompañada por una profe española, Mayte, y yo con Jorge. Mayte le comentó qué si teníamos casa... qué donde queríamos, porque un profe de español, Esteban, quería dejar la suya en Uccle. Esa misma tarde Esteban vino con Borja, hablamos y dicho y hecho, nos fuímos a ver la casa. Pues nos gustó y el precio cuadraba. Ayer ya quedamos con el propietario, Pierre, y por su parte, si no tenía que poner dinero, of course, le parecía bien. Así que, salvo contratiempos o impedimento de última hora, ¡ya tenemos casa! Con Estebán, que ha estado trabajando muchos años como profesor en Colombia hay muy buen feeling, como diría el Pep, al igual que con el resto de familia, y es como si nos conociéramos de siempre. Para el 19 de marzo, día del Padre no festivo aquí, deberíamos estar ya en la nueva casa.

Para acabar, os pongo unas fotos del domingo que nos acercamos al parque de Wolluwé. Como podéis ver, el lago estaba helado, aunque hoy la temperatura es ya de unos 9 grados.